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Kuña Guápa, polka de Clementino Ocampo. Ñe’êpoty – Poesía en Guaraní

En el castellano paraguayo guapa es la mujer trabajadora, la que no rehuye el sacrificio y se enfrenta con coraje a los reclamos de la supervivencia cotidiana. El poeta CLEMENTINO OCAMPOS -nacido el 14 de noviembre de 1913 en San Lorenzo y fallecido en Asunción hace algunos años-, escribió los versos de KUÑA GUÁPA, retratando a quien convierte el día en un ritual de labores sin fatiga. «En cierta oportunidad, en uno de los festivales amenizados por Ocampos éste se acercó a ella y le dijo ‘Negra: hoy quiero presentarte oficialmente una música hecha para vos. La llamé KUÑA GUÁPA. Ella contaba que en ese momento estaba con su novio oficial por lo que le respondió: ‘Aniangáke Clementino ani voi oñantoja ndéve cháke rojukáne (Ten mucho cuidado y que no se te antoje porque te voy a matar)». ‘Ipõrã che kamba. Noromot?mo’ãi péicharamo (Está bien, no te haré pasar vergüenza entonces)», le retrucó él. ‘Eme’? ótrape la nde purahéi. Ndachepochy mo’ãi (Dale a otra la canción. No me voy a enojar por eso)», le pidió Cristina», narra Javaloyes reproduciendo lo que había escuchado de la enfermera que por algún tiempo tuvo aquel comedor.
Cristina fue la enfermera del doctor Javaloyes y otros médicos en una clínica que abrieron en Limpio. Trabajó también como ama de llaves en la casa de una médica.

«Cristina era morena. Sus amigos médicos le llamábamos cariñosamente pimienta por lo picante de sus comentarios contra las personas que no eran de su agrado. Era obsesiva por la limpieza y sumamente pulcra. Estaba permanentemente acicalada y perfumada. No escatimaba el comentario mordaz contra cualquiera de sus amigos si no estábamos en forma. Era una mujer muy alegre, simpática y servicial. Con ella no se podía estar triste. Vivía cerca del hospital central del Instituto de Previsión Social. Al salir del trabajo, nos íbamos a su casa», concluye el Dr. JUAN NICOLÁS JAVALOYES.
Hoy la obra es tildada de machista. Sin embargo, en su origen -por lo expuesto-, no pretendió ser sino la exaltación de una kuña guápa de ley.

Fuente: Dr. Juan Nicolás Javaloyes.

 

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